Somos más fuertes de lo que pensamos. Eso me dijo una amiga hace tiempo, y cada vez soy más consciente de la razón que tenía. No sabemos la capacidad de aguante que tenemos hasta que nos vemos metidos de lleno en alguna circunstancia que hace encender el botón de alarma, y reaccionamos, como si estuviéramos preparados para ello, automáticamente, nos protegemos, sacamos la coraza que nos envuelve y de alguna forma conseguimos soportar el chaparrón.
Aunque nos sintamos débiles, aunque pensemos que se nos queda grande, aunque nos arrebaten aquello que nos hace sostener en pie. Salimos a flote. Subsistimos, porque al final las garras las sacamos precisamente para eso, para subsistir. No hay más.
El golpe más duro que puedas imaginar, el dolor que consigue aprisionar el alma, el que rompe en mil pedazos la razón de toda existencia, aquel que te hace enmudecer, enloquecer, el que amamanta la desesperanza. Ella lo vivió, muchos lo vivimos en aquel desolador y triste Diciembre.
De pronto, sin más, sucede, se apaga la llama, el mundo ensordece, se calma el fluyo de la vida, y todo parece desfallecer. Los pilares que nos sostenían se convierten en simples escombros, y nos encontramos perdidos, desorientados, sentimos desfallecer.
Al final parece que todo sea un juego, y nosotros simples peones de la partida. Y caemos, aunque nos sintamos invencibles. Aunque creamos firmemente en la perpetuidad de nuestra esencia. Y nos equivocamos, como casi siempre.
Y dicen que todo tiene un motivo, aunque a veces nos cueste comprenderlo. Y te aseguro que esta vez no lo entendí. Porque era injusto, porque fue tremendamente desesperante saber que no estaba en tus manos, ni en las de nadie. Tal vez fue azar, tal vez simplemente tenía que pasar.
Y allí la abracé. Y solo sentí responsabilidad. Toda la que tenía por delante para seguir luchando a pie de guerra en el tablero. Porque no quedaba otra que mantenerse erguida, que aceptar, asumir lo acontecido, y continuar.
Porque después de la pérdida, queda la reconstrucción, la que uno mismo se hace por necesidad. La que se espera y la que se necesita. Y fue fuerte, y lo sigue siendo, porque al final no es más que una carrera de fondo, la mancha está hecha, la huella se queda, y el camino es largo.
Y al final sonrió, y me sorprendió. Porque esa sonrisa tuvo más valor que otras, porque costó infinitamente más dibujarla. Porque transmitía fuerza, mucha fuerza, la que nunca imaginó que tendría. Y no dije nada, porque hay momentos en los que el silencio resulta ser la respuesta más confortable. Porque simplemente la presencia lo dice todo.
Un apretón de manos, una mirada de apoyo, el brazo alrededor del cuerpo, una caricia, gestos que lo dicen todo y no dicen nada. Gestos que transmiten más que millones de palabras vacías. Porque se quedan por siempre. Permanecen para siempre.
Creo que ambas la vimos entre nosotras. Riendo como siempre. Asombrada por lo que la vida junta y arrebata.
Pues sí, la vida te sorprende, o puede que seas tú el que sorprendas a la vida. Y es cierto que tenemos, valemos y podemos más de lo que pensamos. Tienes mucha razón. Sueles tenerla.
besos
Fer
Me gustaLe gusta a 1 persona
Me gusta eso que has dicho, «Puede que seas tú el que sorprendas a la vida», ¡Qué razón tienes! Y, muchas veces, también a ti mismo. Gracias Fer por pasarte. Besotes de los fuertes.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Totalmente de acuerdo con el magnifico texto de hoy.
Como siempre es un placer visitar tu blog y leerte.
Mil besazos
http://www.teresaquiroga.com
Me gustaLe gusta a 1 persona
Para mi es un placer verte por aquí y saber que disfrutas leyéndome.
¡Besos!
Me gustaMe gusta
Me encantan tus palabras guapa!
Dress to Impress Ibiza
Me gustaLe gusta a 1 persona
Mil gracias! 🙂
Me gustaMe gusta
Me encanta como escribes.
http://me-andmybag.blogspot.com/2015/07/new-in.html
Me gustaLe gusta a 1 persona
Mil gracias guapa 🙂
Me gustaMe gusta
Me encanta!! Siempre me encanta 🙂
Dress to Impress Ibiza
Me gustaLe gusta a 1 persona
Nosotros somos capaces de sorprendernos a nosotros mismos y a nuestras propias vidas… Un fantástico post! Un saludo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Totalmente de acuerdo. Uno nunca sabe donde tiene el límite, parece infinito. Besos 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
pues yo si que creo que todo pasa por algo , aunque sea de las mayores desgracias , siempre nos trae algo nuevo . un beso guapa y bonitas relfexiones!
Un Rincón Para Mis Botas blog
Un Rincón Para Mis Botas en Bloglovin
Me gustaLe gusta a 1 persona
Me alegra que te guste. Gracias por comentar y aportar tu punto de vista 🙂
¡besos!
Me gustaMe gusta
Qué bonito el post!!! Me encanta como escribes… te he descubierto de casualidad y me encanta!
Hoy videoblog enseñando mis compras de rebajas. Os va a encantar!!
http://www.preparadaslistasya.com
Me gustaLe gusta a 1 persona
Siempre son una alegría las nuevas incorporaciones. Me alegra que te guste. Espero leerte más por aquí.
besos 🙂
Me gustaMe gusta
Love the pictures!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
muy bonitas palabras! sin duda son para reflexionar
muchos besos desde:
http://www.front-low.com
Te espero!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias Carla 🙂
Me gustaMe gusta